Una correcta limpieza de extractores de cocina es importante para mantener la salubridad del aire que respiramos en nuestros espacios interiores. No olvidemos que este electrodoméstico tan solícito se encarga diariamente de atrapar la grasa en suspensión y los humos, olores y sustancias derivadas de la quema de combustibles altamente nocivas. Todo ello los convierte en un foco de insalubridad potencial.

Si tu cocina está destinada a cumplir con una actividad industrial de restauración hostelera o cualquier otro tipo de manufactura alimentaria, deberás cumplir con una serie de requisitos de inspección periódica que garanticen la protección de tus empleados. Una exposición constante a subproductos procedentes de las combustiones puede tener consecuencias muy graves a largo plazo. Entre las afecciones más comunes encontramos el asma, los dolores de cabeza y la fatiga, todas prevenibles cumpliendo los plazos de inspección estipulados legalmente.

La necesidad de acondicionar las nuevas instalaciones a los rigores del ahorro energético implica la construcción de edificios más herméticos. Tanto la reducción del volumen de aire que se ventila como el gran número de elementos químicos que se utilizan en el aislamiento hacen indispensable la limpieza de extractores de cocina al menos una vez cada 6 meses. Esto contribuye decisivamente al saneamiento ambiental y, lo que es más importante, reduce los niveles de humedad del habitáculo, causa principal de la proliferación de bacterias y hongos.

En Molist Germans somos especialistas en la limpieza de extractores, campanas y filtros de chimeneas. Nuestra filosofía de trabajo consiste a llevar a cabo nuestros proyectos con un mínimo impacto en la marcha de las actividades de nuestros clientes, asegurando así que su negocio no se vea afectado por los trabajos de limpieza. Disponemos de la última tecnología en videovigilancia de chimeneas, así como un personal rigurosamente formado en el deshollinamiento y la limpieza industrial de extractores de aire.